5 de setiembre de 2017. La Dirección Nacional de CEN CINAI triplicó en término de un año, la cantidad de establecimientos en donde se imparte el servicio de atención nocturna. De 12 CEN-CINAI con dicha prestación a mayo de 2016 se pasó a 39 a junio de 2017.
Este tipo de servicio se implementó con el objetivo de que las madres o encargados de los niños y niñas puedan culminar sus estudios.
En el primer semestre del presente existen un total de 483 madres que estudian de noche. Y 922 niños y niñas beneficiados con el servicio en las 9 Direcciones Regionales de CEN-CINAI. (Ver tabla)
Existe un importante impacto que ha generado el servicio nocturno en la promoción o rendimiento académico de las estudiantes madres; por ejemplo hay servicios como el del CINAI de Guararí donde han habido promociones hasta del 100% (madres que pasaron al siguiente nivel académico o ganaron bachillerato)
Así lo confirma Allan Solano, Director del Liceo Carlos Meléndez Chaverri de Guararí de Heredia, quien dijo qué: “ha sido de mucho provecho la coordinación entre el MEP-CEN-CINAI con este servicio de cuido nocturno, el beneficio mayor es que las madres no desertan y finalizan con muchos éxitos sus estudios”.
Kimberly Mejía es madre soltera, posee 21 años de edad, vecina de Los Sauces de Guararí de Heredia, cursa el décimo año en el Liceo Carlos Meléndez Chaverri y tiene un hijo de dos años, beneficiario de la atención de cuido nocturno.
“El bebé tiene un año y seis meses de estar en el CINAI. De no ser por el CINAI no podría estudiar, porqué no tengo quien me lo cuide, acá tratan muy bien al bebé y me da tranquilidad a mí. Desde el año lo dejé en el CINAI, se adaptó muy rápido y le gusta mucho venir aquí. Me tranquiliza mucho que acá este bien cuidado y lo quieren mucho, he ido notando los cambios en él y va muy adelantado con lo que le enseñan aquí”, argumentó Mejía.
Otro valor agregado es que la comunidad se ve beneficiada, porque su población juvenil en especial los que ya son jefes de hogar concluyen sus estudios secundarios, se les abre la puerta para obtener trabajo mejor remunerado y se va eliminando gradualmente su nivel de pobreza. Por otro lado, les permite tener mejores opciones de empleo y por ende también de superación personal. Asimismo, existe una reducción significativa de la exposición de los niños y niñas a situaciones de riesgo ya que en el CEN-CINAI están atendidos en un servicio seguro y especializado.
En los centros nocturnos, los niños llegan a las cinco de la tarde en microbuses. Se les recibe y se inicia la jornada con actividades de hábitos de higiene como el lavado de manos. A las seis de la tarde se les da la cena, con todos los requerimientos nutricionales que necesitan los niños y niñas; el menú es supervisado por una nutricionista.
Luego entran a actividades reposadas o tranquilas porque ya es de noche; trabajan en grupo, se estimulan las áreas de motora fina, gruesa, cognitiva entre otras y cerca de las 8 y 30 de la noche, se sirve la merienda, luego es el niño o niña es quién elige las actividades siguientes como escuchar cuentos, música, pintar hasta que lleguen sus padres o madres, para su regreso al hogar.
